CAPÍTULO VIII DE LA DISTRIBUCIÓN Y APROVECHAMIENTO DEL AGUA

Art. 104. Continuará en cuanto a las dotaciones y tandas la práctica hasta aquí observada, conforme a los antecedentes que existen en el Archivo de Ayuntamiento de Murcia. Las tierras que riegan con las rafas en ambas Acequias Mayores, tienen su tanda desde las seis de la mañana de todos los domingos hasta igual hora de la mañana del Lunes, observándose lo prevenido en la Ordenanza del año 1842 para la de Barreras y continuando la distribución establecida para la de la Aljufia.

RAFAS DE ALJUFIA.

1ª) PRIMERA RAFA O DE FONTES. Para encumbre de Regaliciar y duraba de seis de la mañana del Domingo a igual hora del Lunes. Desde que se construyó la Fábrica Nacional de la Pólvora, se hace por la misma este enrafe que, en 15 de julio de 1870 se convino fuese de seis de la mañana del Martes a igual hora del Miércoles, para perjudicar menos a los regantes del último tercio de Zaraiche o Santomera que tienen su tanda los Jueves y Viernes, días que la Fábrica venía entablando. Antes de esta rafa, a más de Regaliciar; riegan las Ruedas de Felices y Conde de la Concepción (antes de Fontes) y el Brazal del Pavón, todos a la derecha.

2º) DEL MOLINO DE LA ÑORA. Se hace junto a este molino y para regar menos de una docena de tahúllas en tierras altas de Beniscornia; por el Portillo de Esbry, de seis a ocho de la mañana del Domingo. Antes de esta rafa están, a derecha, las ventanas de los Olivas y de la Olla y el portillo de Carrión; a izquierda, Churra la Vieja y Alfatego; en medio podría decir, o sobre el cauce, la legendaria Rueda de la Ñora.

3º) DEL MOLINO VIEJO DE PÓLVORA. Se hace donde estuvieron los primeros Molinos de la Pólvora, para regar unas 100 tahúllas propias de los Herederos de Almansa y una veintena que compró el fabricante Sr. Miñano. Dura de las 6 de la mañana del Domingo al Lunes a igual hora.

4º) DE LOS ILLANES. Por las mismas horas y para que el agua bañe siete Ventanas a izquierda y tres a derecha, dos que se llaman de los Mesegueres y una de los Illanes.

5º) DEL PUENTE DE GUADALUPE. Se hace junto al Molino de las cuatro piedras durante las mismas horas de la anterior, para regar tierras altas de los Alegrías, Rabadá n y Meseguer a derecha; y a izquierda las de Botías, Andrea y Pepillo. Antes de esta rafa están las de Tomas de Arboleja y de Bendamé Mayor y Bendamé Menor.

6º) DE DOÑA ANA. En el puente de este nombre, y para riegos altos de Aljufia, en las mismas horas. A derecha Ventanas de Zaragoza, Saura, Alarcón y Pedro José; a izquierda Alegría, Zaragoza, Baril, Panza y Tomás. Entre la anterior y esta Rafa, toma Nácar.

7º) DEL MOLINO DEL AMOR. También desde las seis de la mañana del Domingo a Lunes seis de la mañana, enfrenando las Tomas de Nácar, Zaraiche y Caravija, para que no acrezcan su dotación durante dicho enrafe, y guardando el Molino ciertas prevenciones.

8º) DEL MOLINO DE ZOCO. Durante las mismas horas y para que tome el Chorro de San Diego.

RAFAS DE BARRERAS

Tiene dos tandas o sistemas de rafas cada ocho días, que se distinguen en de primero y segundo Domingo de agua nueva, y sucesivos que, alternados, correspondan a dichos primero y segundo en que corren las aguas, una vez hecha la monda.

PRIMER DOMINGO DE AGUA NUEVA

1º) RAFA.- DEL PARTIDOR DEL REY. En el sitio donde estuvo el célebre Molinico de tan egregio nombre, contiguo a la Toma de Beniaján, y desde las doce de la noche del Sábado, a las seis de la mañana del Domingo, para que rieguen las Hilas, Alta o de Tovar, de España y Honda.

2º)DEL PARTIDOR DE MERINO. Desde las seis a las diez de la mañana del Domingo, para riego de la Ventana de Valentín, portillo de Cayuela y Ventanas de Faustino, Merino (dos) y Martínez. Las acequias de Albadel y el Batán o Alcatel, antes de este enrafe.

3º) DEL PARTIDOR NUEVO. Por bajo de la Acequia de Gabaldón para las ventanas de Martínez, Egea, Beltrán, Carrasco, Campillo y Lechuga, desde las diez a las once y media de la mañana de dicho primer Domingo.

4º) DEL MOLINO DE OLIVER O DE ALJUCER. Se hace en este Molino desde las once y media de la mañana hasta la una de la tarde del Domingo, para que rieguen las Ventanas de Navarro, Felicia y Aroca, además de las de Plaza, del Porche y del Rey, que riegan sin tanda.

5º) DE LOS PARTIDORES, DEL PARTIDOR DE ALMARCHA O DE LOS COMUNES. (1). Por bajo de la Toma del Junco y desde la una a las cuatro de la tarde del Domingo, para que rieguen los Portillos de Garica, Archar y Marín, y tierras altas del Junco. Para hacer este enrafe, se ataja a la vez en los partidores de Barreras y Junco, que están a la par, hasta que, a las dos de la tarde, se destapa el Junco, siguiendo Barreras tapado hasta las cuatro.
Durante el primer tiempo, o sea de una a dos, riegan las tierras altas de Barreras, menos las que lo hacen por una Ventana que toma sin sujeción a tanda en los demás días, por lo que está tapada de seis de la mañana a seis de la tarde del Domingo.

6º) DEL PARTIDOR DE BARRIOMAR O DE LA CASICA DE LOS TABLACHOS. Para que se riegue sin tanda la Ventana de Barriomar desde las cuatro a las seis de la tarde del Domingo, pero desde las dos de la tarde que ha levantado Junco hasta las seis de la mañana del Lunes, riegan de sobras sus partidores primero a cuarto. A las cuatro de la tarde, toma el agua el Partidor de Barriomar donde estuvo la toma de las Condominas y Rincón de Velarde, a cuyo Partidor se dejaron estas dos horas, para que regara las tierras altas de Tizón y Villaleal.

RAFA DEL PARTIDOR DE RATONES.

No existe desde que se edificó sobre todo el terreno que regaba. Después de concluidas estas seis rafas, a las seis y media entabla en el Óvalo, el primer Partidor de Alfande, y ha terminado Barreras sus rafas del Primer Domingo.

SEGUNDO DOMINGO DE AGUA NUEVA

1ª RAFA. MOLINO DE LOS ABADES. Para regar tierras altas de Barreras y algunas de Benialé, desde las doce de la noche del Sábado a las seis de la mañana del Domingo, haciendo enrafe el Molino levantando los escorredores y no lostablachos de las piedras y estando tapadas Menjalaco, Benialé, Benabía y Santarén; antes de esta rafa hay considerable número de Ventanas, Portillos, Ceña y Contraceñas.

2º) DEL PARTIDOR DEL HORNO. Desde las seis de la mañana (aunque a este partidor no llega el agua hasta las siete) hasta las seis de la tarde, atajando al mismo tiempo dicho primer Partidor de la Puxmarina y el del Rey, sin que nadie pueda atajar en Barreras durante aquellas horas, pero pudiendo hacerlo, Junco en sus primeros cuatro Partidores, para recoger sobras de agua hasta las seis de la mañana del Lunes, y Alfande, cuyo primer Partidor llamado de Pinares, entabla, también, de seis a ocho y media de la mañana del Domingo y sucesivamente todos los partidores siguientes de esta acequia hasta las seis de la tarde, hora en que empieza la tanda de Villanueva. No obstante lo dicho, el Partidor del Rey levanta antes, si antes concluye de regar Hila Honda, y le imita el del Horno, porque ni uno ni otro pueden distraer aguas de esta rafa para otros riegos.
A las seis de la tarde, el Partidor del Rey y siguientes levantan hasta las ocho de la noche de este segundo Domingo, porque como se ha dicho, es la Tanda de Villanueva y para que, con más rapidez baje el agua a esta acequia, a la que, ello no obstante, llega a las doce de la noche. Desde las seis de la mañana ha empezado a percibir Villanueva las sobras de todas las rafas del día (porque estas sobras se le concedieron en sustitución de dos horas que se le quitaron en el arreglo de 1842) hasta el martes a las once y cuarto de la mañana a cuya hora toma el agua Benicotó y no la deja hasta las seis de la mañana del Domingo siguiente. NOTA: La enumeración y descripción de Rafas que antecede es copia fiel de la hecha por D. Pedro Díaz Cassou y figura incluida en la edición de “Ordenanzas y Costumbres de la Huerta de Murcia” de 1889.

Art. 105. Las alteraciones, roturas y demás abusos que se cometan o notaren en las tomas de las acequias, serán inmediatamente repuestas a su verdadero estado a costa de los interesados regantes de la acequia que reciba el beneficio o aumento de sus aguas a virtud de aquella novedad, y si hubiese molinos en el cauce, pagará el molinero dos terceras partes y una los regantes; si se causare perjuicio a tercero, se abonarán por los mismos y además incurrirán en la multa del tanto al triplo del daño que causaren a juicio del Consejo de Hombres Buenos, quedándoles salvo su derecho para repetir contra el causante si apareciere o resultare después.

Art. 106. Cuando se acaba de regar, debe taparse bien la ventana de la acequia dejando abierto el portillo del bancal para que entre en él toda el agua que por cualquier motivo salga de la acequia y no perjudique a nadie. Si después otro tiene que aprovechar el agua por el mismo brazal, tapará éste el portillo anterior y dejará el suyo abierto con el mismo objeto; cuidando siempre cada uno de cerrar el portillo del que regó antes, cuando quite la parada para empezar a regar.

Art. 107. Para que no se extravíe el agua no basta que los brazales no tengan cola; deben también estar recargados o levantados los márgenes de los bancales de modo que por encima no salte el agua a los caminos, escorredores ni a otra parte, por lo menos cuatro palmos sobre el bancal más alto que se está regando, correspondiendo el mantenimiento a los colindantes.

Art. 108. El que sonriegue bancal ajeno o algún camino o de cualquier modo extravíe el agua, pagará el daño o perjuicios y además una multa a juicio del Consejo de Hombres Buenos, según las consecuencias.

Art. 109. De esta multa sólo se eximirá el que por primera vez haga el sonriego por algún ratonero, mas no a la segunda porque ya deberá haberlo remediado cavando el margen o de otro modo.

Art. 110. La pena que se establece en el Art. 108 se entiende establecida para todos los casos en que se quebrante cualquier artículo de estas Ordenanzas que no tenga pena determinada.

Art. 111. El que riegue en la tanda de otro usurpando el agua, además de pagar los daños y perjuicios que causare, según tasación de peritos nombrados por cada parte y tercero en caso de discordia, que será nombrado por el Consejo de Hombres Buenos, incurrirá en una multa del tanto al triplo del daño que causare a juicio del referido Consejo.

Art. 112. Para acreditar el hurto del agua bastarán dos testigos que hayan visto estar entrando el agua en el bancal del usurpador, o tres que hayan visto el bancal regado. En los casos en que por la gravedad del asunto, a juicio del Consejo deba tomarse precauciones para que los testigos no se confabulen, deberá disponerse que estos esperen en un lugar apartado de la Sala de Audiencia, y que sean llamados uno tras otro; pero siempre serán examinados a presencia de las partes y del público. Si se presentase contradicción testifical se resolverá el asunto por medio de la vista ocular que determinará y dispondrá el Consejo de Hombres Buenos a costa del que resulte condenado.

Art. 113. El que no utilice el agua de su dotación en las horas de su tanta no puede cederlas a otro y debe dejarla correr como de sobra. Es agua de sobras la que ya ha pasado del portillo, ventana o partidor a que corresponde la tanda.

Art. 114. Los que rieguen por alto podrán hacer sus entables veinticuatro horas antes de su tanda, no con tierras sino con tablas; advirtiéndose que los que lleguen en el primer día de la tanda, no pueden entablar hasta la hora en que esta principia en la cabeza de la acequia.

Art. 115. Ningún hacendado podrá, fundado en la clase de cultivo que adopte, reclamar mayor cantidad de agua o su uso, por más tiempo de lo que una u otro proporcionalmente le corresponda por su derecho.
El hacendado de la comunidad que no efectúe el pago de los Repartos, Multas y cualesquiera otros que le fueren reglamentariamente impuestos, satisfará un recargo del 10 por cien cada mes que dejó transcurrir sin realizarlo. Habiendo pasado tres meses sin verificar dicho pago y su recargo, se le podrá prohibir el uso del agua hasta tanto no lo haga. Para el devengo total de dicho recargo bastará una fracción del tiempo cualquiera, dentro del mes a que corresponda la morosidad.
En todos los casos, la Comunidad podrá ejercitar contra el moroso los derechos que le competan, siendo de cuenta del mismo todos los gastos que se originen, todo ello, sin perjuicio de acudir a la Vía de apremio, prevista en el Reglamento General de Recaudación.